La fascitis plantar es una de las patologías más comunes del pie y principal causa de dolor en el talón. Se trata de una inflamación de la fascia del pie que inicialmente no es grave pero, si se sobrecarga la zona, acaba volviéndose crónica. Afecta en su mayoría a personas de entre 40 y 60 años con sobrepeso o que llevan una vida sedentaria.
El tratamiento estándar consiste en el uso de plantillas que reducen la presión al apoyar el pie, además de realizar ejercicios de estiramiento muscular. Si no hay mejoría se suele aplicar un tratamiento invasivo, a base de infiltración de corticoides. Y, en último caso, una intervención quirúrgica.
Para evitar este último escenario, pues tras una operación siempre hay riesgo de complicaciones, un equipo del Hospital Universitario Infanta Elena (Madrid) ha desarrollado una nueva técnica mínimamente invasiva denominada “hemifasciectomía plantar endoscópica”(1). Tan solo requiere de dos incisiones a nivel del talón, a través de las cuales se introduce el instrumental, lo que evita que en la planta del pie haya una herida. De este modo el paciente puede apoyar el pie al día siguiente de la intervención, lo que a su vez permite una recuperación más rápida.
Fuentes:
Artículos relacionados