Gas radón: la desastrosa gestión que pone en riesgo su salud

El gas radón proviene del uranio que se desprende de manera natural, con el paso del tiempo, de las rocas del subsuelo, sobre todo en terrenos graníticos. Es la segunda causa de cáncer de pulmón después del tabaco (incluso entre personas que nunca han fumado). Y se estima que solo en España mueren entre 1.500 y 2.000 personas al año por su culpa.

Pues bien, hay una Directiva de la Unión Europea (UE) para controlar la cantidad de gas radón en los edificios y España, cinco años después, por fin la pone en marcha.

Esto no supone el final del problema, ya que el objetivo de diseñar un Plan con medidas de protección concretas a lo que también obliga la norma para el gas radón, aún ni se ha elaborado ni hay fecha para su instauración.

Además, un nivel máximo de 300 Bq/m³, que es el que se pretende adoptar en España, es demasiado alto y seguirá poniendo en riesgo la salud de las personas. Muchos expertos consideran que a partir de una concentración de 100 Bq ya afecta a nuestro bienestar.

Por ello, si habita en casas o pisos bajos de zonas graníticas, valore la posibilidad de hacer mediciones de radón con profesionales, sobre todo en sótanos y trasteros. Lea más aquí.