Las vacaciones no son excusa para dejar de moverse ¡ni siquiera durante el viaje! Y es que el sedentarismo siempre acaba pasando factura.
Por ello le indicamos algunos estiramientos que le interesa hacer en vacaciones. Son muy sencillos y, lo que es más importante, harán mucho bien por su salud.
Las vacaciones ya están en la mente de muchas personas, que no ven la hora de llegar a su destino y disfrutar de días de sol y playa.
Si este es su caso, o va a serlo en los próximos días, tome nota de los sencillos ejercicios de estiramiento que compartimos con usted. Son los mismos que recomienda Christophe Carrio, asesor deportivo de la publicación Salud AlterNatura.
Y es que pasar largas horas tumbado en la toalla, o sentado en el coche durante el trayecto hasta el lugar de vacaciones, puede causar molestias musculares y articulares debido a la falta de movilidad.
Pero con los siguientes ejercicios puede evitar que estos problemas le amarguen las vacaciones.
Permanecer muchas horas en la misma postura es perjudicial para la espalda, los hombros y las caderas, entre otras articulaciones. Y si además se adopta una mala postura, como a menudo ocurre cuando se va en coche, esos problemas pueden ir a más.
Por ello le interesa realizar estos ejercicios de estiramientos en las pausas del viaje. Por ejemplo, cuando vaya a repostar o pare en un área de servicio para tomar algún refrigerio. Así garantizará la movilidad y el confort de musculatura y articulaciones.
De pie al lado del vehículo y apoyando los brazos en la parte superior de este, como puede ver en la imagen, estire una pierna hacia atrás en perpendicular al vehículo. Intente pegar el talón al suelo y mantenga la postura al menos 15 segundos antes de pasar a la otra pierna.
De pie y con una mano apoyada en el vehículo, flexione una pierna a la altura de la rodilla y agarre el pie por detrás con la mano del lado opuesto del cuerpo, tratando de llevar el talón hacia los glúteos (y manteniéndolos contraídos). Esto le permitirá estirar totalmente sus cuádriceps. Repita una vez con cada pierna, manteniendo la postura unos 15 segundos.
De espaldas al vehículo, agárrese del tirador de la puerta y a continuación incline suavemente la cabeza. Puede empujarla suavemente con la otra mano, pero sin forzar. Realice el estiramiento una vez a cada lado, manteniendo la postura otros 15 segundos.
¡Y ojo! Estos ejercicios de estiramiento deben hacerlos tanto el conductor como el resto de pasajeros del coche, ya que en cualquier caso la movilidad es muy reducida durante el viaje.
Una vez llegado al lugar de vacaciones, es importante seguir moviéndose y permanecer activo para prevenir cualquier tipo de molestia (muscular o articular) causada por el sedentarismo.
¡Y con estos ejercicios le resultará muy sencillo!
Colóquese en cuclillas y con la rodilla derecha flexionada y apoyada en el suelo, al lado del pie izquierdo. A continuación, siguiendo la guía del dibujo, apoye el torso sobre la pierna izquierda, flexionada, para ejercer presión, y sienta cómo se estiran los músculos de la pierna derecha. Mantenga la postura durante 20 segundos antes de cambiar a la otra pierna.
De nuevo en cuclillas, con la rodilla izquierda flexionada y apoyada en el suelo, al lado del pie derecho, inclínese hacia atrás, apoyando las manos en el suelo y elevando la pelvis. Esta postura, que también debe mantener durante 20 segundos antes de cambiar de pierna, le ayudará a estirar la zona de los cuádriceps.
Una vez más, colóquese en cuclillas y con la rodilla izquierda flexionada junto a la pierna derecha, que permanecerá extendida y apoyada en el suelo. En esta postura, intente estirar al máximo el tronco hacia arriba y a continuación hacia delante, como puede ver en la imagen, sin mover la cadera. Si le resulta complicado, puede usar los brazos para mantener la posición. El objetivo es que el cuerpo esté lo más estirado posible y en tensión, pero sin dejarse caer sobre la pierna estirada. Intente aguantar la posición unos 10 segundos y repita con la pierna izquierda estirada.
Lo idóneo es que realice este circuito al menos una vez al día. Pero si cree que sus “sesiones de toalla” son bastante largas, puede hacerlo varias veces durante la jornada o, mejor aún, alternarlo con paseos por la playa o visitando la zona en la que esté disfrutando de sus vacaciones.
Artículos relacionados