“Aplicar coloraciones químicas en la cabeza es como activar una auténtica bomba de efecto retardado”. Quien habla con tanta contundencia sobre los productos químicos que se aplican en las peluquerías es… un peluquero.
Y sabe de lo que habla, pues era un peluquero “convencional” hasta que enfermó seriamente (eccema, asma, dificultades para respirar…) a causa de los productos que todos los días aplicaba en su trabajo en forma de mechas, decoloraciones, permanentes, alisados…
Y si eso le pasó a él por aplicarlos, imagínese a las personas que habitualmente se tiñen el pelo, se retocan las mechas, se alisan el pelo o se hacen la permanente.
“Las moléculas químicas de los pigmentos son muy finas, penetran por el cuero cabelludo y pasan a la circulación sanguínea. Allí se acumulan y pueden fijarse en el páncreas, el hígado… hasta que llega el día que se desarrolla una enfermedad grave”, continúa explicando este profesional. Se llama Charley Assoun, y lejos de “cortarse la coleta” en su profesión, lo que hizo fue seguir ejerciéndola pero utilizando exclusivamente productos bio. De hecho ha creado un grupo de salones de peluquería en los que no hay lugar para lo químico, puesto que sólo se utilizan productos a base de plantas.
Utilizar plantas tintóreas (cortezas, flores, hojas…) para teñirse el pelo es algo tan antiguo como el propio mundo. Y este mes en Plantas & Bienestar usted va a descubrir de la mano de Charly Assoun cómo se hacen las mezclas de pigmentos para obtener tonos rubios, rojizos y castaños totalmente naturales. Cómo, por ejemplo, se puede añadir caoba o cáscara de nuez al amla (un polvo indio que refuerza los morenos y que aporta también un delicado cuidado al cabello) según el resultado que se desee.
¿Pero qué sucede si usted ya tiene los cabellos teñidos con productos clásicos? Pues que le enseñamos a hacer correctamente la transición hacia una coloración 100% vegetal. ¡Verá cuánto se lo agradece su cabello!
Y es que la coloración vegetal esconde muchas más ventajas. Las plantas de las que se compone actúan sobre el pelo aportándole todos sus beneficios, espesándolo y suavizándolo al mismo tiempo. Verá que sólo tiene que preocuparse de seguir las indicaciones que le proporcionamos.
Los colores vegetales tiñen muy bien (de hecho, mejor que los químicos) y resisten las agresiones externas (sol, piscina, mar…). El color no se va y el efecto raíz no es tan marcado al crecer el pelo.
Nuestro entrevistado no pretende que usted vaya a sus peluquerías (¡de hecho quizá le pillen un poco lejos, pues están en París!) sino que comparte generosamente todos sus secretos para que usted pueda preparar las soluciones en su propia casa y conseguir disfrutar de un pelo sano, de color natural y completamente libre de químicos.
No deje de leer todo lo que este mes le contamos en el nuevo ejemplar de Plantas & Bienestar y empezará a cuidarse de otra forma, completamente libre de tóxicos productos químicos.
Y no sólo eso. Porque por supuesto este no es el único tema que encontrará este mes en Plantas & Bienestar. También descubrirá:
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