Conozca su ageotipo para prevenir cientos de problemas de salud

“El paso del tiempo es inevitable”. ¿Cuántas veces hemos oído esta frase o nos la hemos dicho a nosotros mismos? Sobre todo al ver que, con los años, empiezan a aparecen esos achaques de salud que antes no teníamos.

Sin embargo, hay personas por las que parece que no pasa ese tiempo. O que envejecen con un mayor bienestar, incluso teniendo la misma edad y llevando más o menos el mismo estilo de vida.

Pues bien, algunos investigadores han intentado averiguar por qué ocurre esto, ya que parece que no todos envejecemos de la misma manera. Y la clave podría estar en los ageotipos.

Patrones de envejecimiento

El biólogo estadounidense Michael Snyder es pionero en este campo. Fue en el año 2020 cuando señaló que existen diferentes patrones biológicos, a los que denominó ageotipos, y que determinan nuestro ritmo de envejecimiento. (1)

Para ello realizó un ensayo con hombres y mujeres sanos de entre 34 y 68 años, a los que midió distintos parámetros: proteínas, metabolitos, lípidos… Con este exhaustivo análisis quería determinar qué es exactamente lo que le sucede al cuerpo cuando envejecemos. Y observó que existen distintos patrones de envejecimiento, según los cuales algunas partes del cuerpo envejecen antes que otras.

Existiría así una clasificación de ageotipos. Y saber cuál es nuestro tipo puede ayudarnos a prevenir las dolencias a las que estamos más predispuestos genéticamente.

Conozca su ageotipo (y cómo puede envejecer con salud)

A continuación, puede ver los 4 principales ageotipos, para que pueda identificar el suyo. Y al final de cada descripción le facilitamos el enlace al Protocolo que más interesa en cada caso, por si fuera de su interés para su ageotipo concreto.

1. Ageotipo Metabólico

Se caracteriza porque el sistema metabólico, encargado de transformar los nutrientes en energía, envejece a un ritmo más rápido de como lo hacen otros sistemas del organismo. Y esto hace que aumente el riesgo de sufrir patologías directamente asociadas con el metabolismo, como es el caso de la diabetes.

Según el biólogo Snyder, las personas con este ageotipo deben cuidar especialmente su sistema metabólico, incluso si no tienen sobrepeso o llevan una dieta adecuada, ya que la obesidad o seguir una mala alimentación son los principales factores de trastorno metabólico.

Si sufre algunos síntomas asociados a estos trastornos (dolor abdominal, niveles anormales de glucosa o acumulación de grasa en la cintura), es probable que este sea su ageotipo. Y por ello debe mimar aún más este sistema esencial para la salud.

Conozca el Protocolo de reparación metabólica del Dr. Pescatore.

2. Ageotipo Inmunológico

En este caso es el sistema inmune el que presenta signos precoces de envejecimiento. Y al fallar el sistema de defensa del cuerpo, este no puede defenderse de sus potenciales enemigos (gérmenes, virus, bacterias, toxinas…). Como consecuencia, hay más riesgo de sufrir infecciones de todo tipo, incluidas las desencadenadas por tóxicos (presentes en alimentos, agua, aire y hasta medicamentos) o de tipo inmunológico (enfermedad de Crohn, colitis, esclerosis múltiple, celiaquía…).

Si sufre algunas de estas afecciones, o tiene la sensación de que las infecciones estacionales le duran más y son más frecuentes, tal vez sea porque pertenece a este ageotipo y su sistema inmunitario necesita una ayuda extra.

Conozca el Protocolo Bomba de Inmunidad del Dr. Glenn S. Rothfeld.

3. Ageotipo Hepático

Las personas con este ageotipo ven cómo su hígado envejece con más rapidez, lo que no es nada bueno. Y es que se trata del principal órgano emuntorio del cuerpo, encargado de filtrar y expulsar aquellas toxinas que han acabado en el organismo. Por tanto, si este filtrado falla, hay más probabilidades de sufrir todo tipo de patologías hepáticas, como por ejemplo la cirrosis, incluso si no se bebe alcohol en exceso.

De hecho, este factor genético podría ser la razón del aumento de casos de enfermedad de hígado graso no alcohólico. Y si este es su caso, o nota que su hígado no funciona como debería (la fatiga crónica, el dolor abdominal o la hinchazón son los principales síntomas), debe apoyar al sistema hepático.

Pero también le interesa frenar la inflamación de su cuerpo, ya que cuando el cuerpo se llena de toxinas el sistema inmunitario reacciona con procesos inflamatorios que, en exceso, pueden desencadenar todo tipo de patologías, incluidas las de tipo hepático.

Conozca el Protocolo para eliminar la Inflamación del Dr. Micozzi.

4. Ageotipo Nefrótico

Es el último de los ageotipos que clasificó el biólogo Snyder, y se caracteriza por un envejecimiento prematuro del sistema renal. Ello hace que el riñón, encargado de filtrar y equilibrar los líquidos del cuerpo, desechándolos a través de la orina, no pueda trabajar correctamente. Y cuando esto ocurre aparecen los problemas renales (insuficiencia, piedras en el riñón, cáncer…), pero también se ve afectado el sistema cardíaco, ya que ese desequilibrio en el filtrado de los líquidos provoca cambios en la presión arterial.

De ahí que, tanto si sufre problemas renales, como si su presión arterial no es todo lo buena que debería ser, necesita reforzar su salud cardiovascular.

Conozca el Protocolo de Protección Total del Corazón del Dr. Pescatore.

Cómo envejecer con salud

La investigación sobre los ageotipos no ha cesado y cada vez son más los expertos interesados en este tema. Gracias a ellos se ha descubierto que, además de los 4 tipos que inicialmente clasificó Snyder, también podríamos hablar de un Ageotipo Celular, caracterizado por un mayor estrés oxidativo en todo el cuerpo. O de un Ageotipo Nervioso que afecta especialmente al cerebro. (2)

Pero a esto hay que añadir que los ageotipos no son excluyentes, por lo que una persona puede tener varios patrones de envejecimiento que hagan que dos o más sistemas envejezcan antes que el resto. Además, no hay que olvidar que el envejecimiento de una parte del cuerpo puede arrastrar a otra, por lo que interesaría ayudar a todo el cuerpo en general.

Pues bien, para ayudarle a envejecer con salud tiene las “100 estrategias para vivir 100 años”. Se trata de una auténtica guía de salud en la que se indican las estrategias, demostradas científicamente, que han conseguido que muchas personas cumplan 100 años ¡o incluso más!, con un inmejorable bienestar.

Si usted también quiere ser una de ellas, independientemente de cuál sea su ageotipo, no pierda un segundo y hágase ya con esta obra, que además puede ser suya completamente GRATIS.

Descubra aquí cómo conseguirla y empezar a aplicar una a una sus estrategias para envejecer con salud.

Evidentemente, no podemos detener el paso del tiempo, pero sí contar con aliados para navegar por esa vejez con la mayor tranquilidad y salud posible.