Solemos creer que cuando un médico enferma enseguida sabe qué medicamento debe tomar o a qué experto debe acudir para someterse a una operación. Y que, en consecuencia, comienza el tratamiento directamente.
Es su oficio, lo hace cada día. ¿Por qué iba a perder el tiempo tratándose de sí mismo?
Sin embargo, la mayoría de médicos hace justamente lo contrario: decide esperar.
De hecho, cuanto más experimentado es el médico, más tiempo se toma. Jamás se abalanzaría sobre el botiquín, ni correría a la sala de operaciones.
Y es que durante su larga carrera ha visto cosas particularmente extrañas: personas que, terriblemente enfermas una mañana, parecían más sanas que una manzana al día siguiente; dolores que aparecen… y desaparecen con la misma facilidad con la que han venido; análisis de sangre que presentan índices preocupantes… pero porque alguien ha cometido un error, o porque el ordenador tiene mal configurado no sé qué parámetro…
Es decir, el médico sabe que, si es posible, con frecuencia la mejor solución es esperar un poco.
Cuando alguien lo está pasando mal, se impacienta por ser atendido.
Nada le parece lo suficientemente rápido; le gustaría empezar a medicarse cuanto antes, ser operado de urgencia… y se enfada cuando los médicos se toman su tiempo.
Pero que los médicos esperen para tratarle no tiene nada que ver con la pereza o el desconocimiento. Se toman su tiempo porque eso es algo fundamental.
Lo mejor para usted, por su propio bien, es que no siempre le den un medicamento a la primera de cambio o le operen de urgencia.
A menudo lo que hay que hacer es asegurarse, esperar a que los síntomas se confirmen. Y dejar que la evolución de la enfermedad corrobore el diagnóstico y que el tratamiento contemplado es el adecuado.
Lo realmente importante es, por tanto, no cometer un error médico irreversible actuando precipitadamente.
Los médicos tienen incluso un proverbio para ello, que es el primer artículo del juramento de Hipócrates: “primum non nocere”, que significa “lo primero es no hacer daño”.
En medicina siempre hay que mantener la esperanza de que las aguas pueden volver a su cauce por sí solas, dejando actuar las fuerzas de autocuración del organismo sin que haya necesidad de correr el menor riesgo.
Esa es siempre la solución ideal, ya que el cuerpo es el mejor doctor. Lo que sucede es que a menudo eso requiere tiempo.
Su médico no elige entre curarle o que siga enfermo. Al contrario. La elección que el facultativo debe hacer es la siguiente: “El señor López, ¿tiene más probabilidades de estar mejor de forma global si le trato, o si le dejo así?”
La respuesta, por desgracia, no siempre es simple…
Y es que hay quien cree que salir de la consulta del médico sin una receta bajo el brazo es sinónimo de no haber sido bien atendido. Los médicos se quejan (muchos en privado y algunos de ellos públicamente, como hizo la presidenta del Colegio de Médicos de Murcia) de que hay pacientes que se marchan de la consulta ofendidos e incluso enfadados tras comunicarles que no deben seguir ningún tratamiento. (1)
Se sienten presionados por los pacientes, una presión que, sumada a la falta de tiempo para explicarles por qué se les prescribe o por qué no, desemboca a menudo en la sobreprescripción.
Y los problemas que desencadena la sobremedicación no son pocos ni una cuestión baladí: resistencia a los antibióticos, inefectividad de ciertos fármacos o principios activos… (2)
Cochrane Collaboration publicó hace unos años un estudio para intentar arrojar luz sobre el terrible problema de la prescripción inadecuada de antibióticos por parte de los médicos. Y entre las causas una llama poderosamente la atención: “los pacientes que insisten en tomar antibióticos. Los médicos no tienen el tiempo suficiente para explicar por qué los antibióticos no son necesarios y, por lo tanto, los prescriben para ahorrar tiempo”. (3)
Como ve, el papel que juega el paciente es crucial. Por eso le pido más paciencia, empatía y amplitud de miras, y confiar más en aquel doctor que no desea medicarle a la primera de cambio.
Para ponerse en el lugar de su médico, échele imaginación y haga el siguiente ejercicio:
Imagine que es usted un padre o una madre joven. Su hijo de 4 años se levanta en plena noche llorando porque le duele la tripa. Es la primera vez que le sucede eso.
Al cabo de una hora, los lloros continúan. La angustia va en aumento. Se pregunta si debe vestirse y llevar al pequeño a urgencias.
“Ante la duda, mejor no correr riesgos inútiles”, pensará usted. “Qué más dan el trabajo y la escuela, ¡vámonos a urgencias! Nunca se es demasiado prudente”.
Y, sin embargo… Sin embargo…
Es de noche y usted está cansado. Además, las carreteras tienen hielo y debe conducir 30 km hasta el hospital.
En la sala de espera se verá rodeado por una gran multitud de enfermos. Puede que alguno de ellos tenga alguna enfermedad infecciosa grave, ¡incluso tuberculosis! No hay forma de saberlo. Nadie puede saberlo.
Además, el dolor de tripa no es una de las urgencias que se atienden con más apremio, como sí lo son los accidentes de tráfico o los infartos, por lo que probablemente tendrá que esperar varias horas antes de que un médico evalúe a su hijo. Y en el hospital hay cada vez más gérmenes resistentes a los antibióticos.
Finalmente, su hijo será examinado por un médico de urgencias de servicio que no le conoce de nada, ni tampoco a usted. Vista la organización actual de algunos hospitales, es muy posible que este médico esté extenuado, incluso que no haya dormido nada desde hace demasiadas horas.
Puede que se equivoque al examinar a su hijo y le envíe a hacerse una radiografía porque él tampoco quiere “correr riesgos”. Es decir, que su hijo terminaría recibiendo una buena dosis de radiación, y lo más probable es que fuera absolutamente para nada.
A fin de cuentas, la cuestión que usted se plantea no es “¿debo tratar a mi hijo o no?”, sino “¿qué es lo mejor para él?”.
¿Qué es lo más arriesgado? ¿Mantenerlo un poco más en su cama, con una bolsa de agua caliente en su vientre, una tisana de hinojo y un buen masaje, a la espera de que abra de mañana el centro de salud en el que lo verá su pediatra, o salir ya mismo para urgencias?
La elección es difícil; no hay una respuesta obvia ni sencilla.
Pues ese es exactamente el mismo problema con el que con frecuencia se encuentra su médico cuando es usted el que acude a verle.
Debe reflexionar acerca de cuál es la mejor entre varias opciones, y ninguna de ellas es evidente. No hay solución clara o fácil. ¿Hay que tratar ya o… esperar?
Prudencia, sabiduría y sentido común son las palabras clave, pero también es importante conocer bien las prioridades del paciente.
Antes de ir a ver al médico o al especialista, tómese un tiempo para escribir en una hoja de papel cuáles son sus problemas, sus objetivos reales y sus inquietudes. Piense que su médico no sabe cuáles son sus prioridades y, si quiere que las tenga en cuenta, tendrá que explicárselas usted mismo.
Asimismo, antes de aceptar un tratamiento, párese a reflexionar e incluso consulte con su familia o sus amigos para tratar de dar respuesta a estas cuestiones:
Una vez que haya respondido con criterio a estas preguntas, pase a las siguientes:
Todo esto que hoy le cuento no es ninguna teoría: recientemente he vivido de cerca un caso similar y, desgraciadamente, con un final dramático.
Se trataba de un pequeño que tenía un problema de corazón. Los médicos quisieron operarle y murió. Después de su muerte, se supo que los médicos habían considerado necesaria la operación porque el niño estaba sin aliento, por lo que no podría hacer ejercicio en el colegio en un futuro.
Pero él era un gran lector y le gustaba mucho la música. Era en realidad un niño muy tranquilo. ¡No sería tan grave que no pudiese hacer deporte en la escuela! Si sus padres hubiesen sabido que iban a poner su vida en peligro sólo por eso, habrían rechazado la operación, y quizá hoy el pequeño seguiría vivo.
Es obvio que no es fácil tomar las decisiones correctas, y menos cuando se trata de algo tan importante como la salud. Por eso con mi mensaje de hoy quiero hacer hincapié en que a veces la peor de las decisiones es precipitarse, y también que se debe permitir al médico sopesar con tranquilidad cada caso, incluso si la decisión final es no actuar.
¿Está de acuerdo con este mensaje? ¿Sí? ¿No? Me gustaría conocer su opinión y que entre todos los lectores de Tener S@lud abriésemos un rico debate sobre esta cuestión. Así que, por favor, deje su comentario más abajo.
Fuentes:
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Cierto es que muchas veces se actúa con precipitación; trabajo en el servicio de urgencias de un hospital público donde un día sí y otro también se agolpan personas que buscan una solución rápida a su mal sin haber ido previamente al médico de familia para que le explore y ponga un tratamiento
Estoy de acuerdo! Hoy en día la mayoría de las personas, sobre todo de la ciudad, actúan de esa manera. Por eso, en gran parte, los hospitales están colapsados y con una gran cantidad de casos que con un poco de dieta y algunas hierbas se curarían
Es difícil en una situación preocupante tomar en cuenta lo que ustedes proponen
A veces hemos oído todo lo contrario que hay que actuar rápidamente, que de eso puede depender la vida de alguien
Se ha escuchado si hubiera tardado una hora sin venir hubiera muerto.
En fin mi pensamiento es más vale pasarse que poner en riesgo una vida.
A lo mejor si fuera yo esperaría. Pero si se trata de un ser querido…. No creo que pudiera esperar
Gracias por su buena información. Se aprende mucho y agradezco sus opiniones y buen saber.
Un cordial saludo
Absolutamente de acuerdo!!!
Yo jamás he Ido a urgencias, al final por muy grave que me pareciera
No era urgente.
Me iban a operar de una extracción de útero debido a que tenía muchos miomas, ya tenía hora para la operación, pero consultas otras opiniones y al no tener dolor y debido a que el único problema era el exagerado sangrado durante la menstruación Durante una semana de cada mes….probé magnetice espía y desaparecieron totalmente y se redujeron a algo normal.
Hoy conservo mi útero y ya no tengo ningún problema, Claramente la solución de urgencia no era operar, sino esperar a confirmar antes si algún otro remedio menos agresivo funcionaba,
Estoy totalmente de acuerdo.
Creo que el enfermo debe involucrarse plenamente, ya que es quien mejor conoce su organismo y lo que es bueno y malo para él.
De hecho, la salud y el cuidado personal, tanto físico como anímico, deberían formar parte del curriculum escolar, junto con la alimentación, la defensa personal, la natación, la economía y lo que antes se llamaba educación cívica, que tan escasa es ahora
Estoy de acuerdo.
Solo apuntillar, las personas o pacientes tienen además de problemas «fisico-somaticos» otros de carácter «psiquico-psicologico», todos muy unidos.
Además algunos pacientes ya van a la consulta mal aleccionados por consejos externos, que distan bastante de los consejos médicos bien ponderados y probados científicamente.
Es a veces complejo darle un consejo, el paciente está en la duda y pone en duda la intervención del profesional. Sumado a esto, otros procesos que él tiene, que no es solo uno y que habitualmente no prioriza.
En si la medicina se convierte en un «arte de buena práctica» y la experiencia en estos casos cuenta bastante
Muy interesante este punto de vista. Estoy totalmente de acuerdo.
Debemos siempre tener en cuenta que un tratamiento debe ser global. Me refiero a tener muy en cuenta los llamados efectos secundarios, que para mí son realmente efectos tan primarios como los deseados, sólo que realmente no son deseados.
Gracias por compartir.
Hola:
Me encuentro en una situación similar con mi hija, que presenta una cardiopatía congénita y ya ha cumplido cuatro años. Decidimos no operarla y nos complicaron la vida los médicos y los servicios sociales.
Me gustaría conocer casos similares y cómo argumentarlo legalmente.
También conozco otro caso que la intervención mediante cateterismo dejó a una niña en silla de ruedas y con una gran discapacidad psicomotriz (física y mental).
¿Cómo lo justifican los médicos?
Un saludo.
Gracias.
Estoy completamente de acuerdo con todas estas reflexiones. De hecho las he vivido con mis hijos.
Gracias por estos útiles correos que nos hacen pensar y actuar mejor en las decisiones tan importante s de esta nuestra única vida y la vida de nuestros seres queridos.
Gracias. Un millón de gracias. Seguid ayudando a las personas porque lo estáis haciendo muy muy bien. Saludos
Estoy completamente de acuerdo, con la opinión expresada en su artículo, considero, que es preferible esperar y ver cómo evolucionan los síntomas antes que dar un tratamiento erróneo, salvo que la situación sea de vida o muerte, donde no hay margen de espera, por lo que hay que actuar de forma inmediata, infartos, fracturas, ictus etc
Estoy de acuerdo que el médico debe ser muy prudente ante situaciones que no se ven claras.
La familia, también debe ser prudente y fiarse y continuar vigilando al enfermo para ir viendo qué síntomas presenta…
Gracias de verdad por su enorme y valioso trabajo.
Como decía mi padre, que era médico de pueblo de los antiguos, de los que tenía que ver y tratar todo tipo de enfermos y enfermedades.
No hay enfermedades, sino enfermos y cada uno es particular, por lo que hay que sopesar a cada uno individualmente.
No hay una solución general para todos, pues todos somos diferentes y tenemos nuestras propias circunstancias.
Yo personalmente si puedo pasar sin ir al médico, paso. Muchas veces me dieron fármacos que los tuve que dejar porque me sentaron fatal y en otras ocasiones si me resolvieron el problema. Así que tengo una máxima en mi vida, procurar cuidarme, trabajar la huerta y caminar. Ir al médico si no hay más remedio. Tengo 73 años y me encuentro bien para mi edad.
Tienes toda la razón del mundo, pero ante un problema de esa índole no nos hacemos todas esas preguntas, salimos rápidamente hacia el hospital mas cercano.
Muy de acuerdo con el criterio recomendado.
Estoy de acuerdo en todo lo que dices.
Estoy bastante de acuerdo, pero el ejemplo estatinas/colesterol, con opiniones suyas tan contrarias a las prácticas médicas generalizadas, hacen difícil la contienda con el criterio médico instituido.
¿Por qué no se suscita un gran debate sobre los niveles de colesterol permisibles por más que estén alejados de los preconizados en el sistema?
¿Son preferibles las ventajas de las estatinas a sus inconvenientes?
Un cordial saludo,
Muy acertado el artículo, estoy completamente de acuerdo en el planteamiento y en lo importante que es el consenso entre médico y paciente. Si ésta práctica se utilizara más a menudo todo iría mucho mejor.
ESTOY DE ACUERDO EN QUE NO HAY QUE PRECIPITARSE, solo en casos de vida o muerte: ACV, hemorragia, ataque cardiaco.
Muchas veces los síntomas son engañosos hasta para los medicos, por lo tanto es mejor no apresurarse
Todo en la vida hay que sopesarlo, estoy de acuerdo en esperar. Muchas veces el tiempo suele dar las mejores respuestas.
Totalmente de acuerdo con el artículo. Me adscribí al cupo de mi médico de Primaria, que se acaba de jubilar, al comprobar su prudencia y que mejor te indicaba cama y reposo que cualquier medicamento.
Pero no todas las personas pensamos igual, y a menor formación e información, más se cae en el conductismo de las mafias farmacéuticas que tienen a los médicos como decididos prescriptores de sus productos. Y en parte es comprensible, pues un paciente al que no le recetan nada, posiblemente salga desconcertado de la consulta…, a tal punto de manipulación y conductismo hemos llegado.
Me preocupa grandemente la pervivencia de nuestro Sistema de Salud, y no entiendo cómo, de entrada, se exige una pequeña aportación por acto médico; sólo con eso se reduciría sustancialmente el gasto; todas las personas de mi ámbito social coinciden en ello, pero… ¿por qué no se hace…? Yo creo que por intereses creados por estas mafias (a pensar mal…) y por el terrible sistema político que padecemos de todos contra todos, pues aquel grupo político que se atreviera a implantar el copago sería masacrado por el resto con argumentos de todo tipo, aunque en el fondo les pareciera adecuada y necesaria la medida.
Gracias ? por todas las publicaciones, por tomarse el tiempo de compartir todas sus investigaciones conocimientos y tiempo dedicado, muchas felicidades a usted y al equipo con quién trabaja???.
Yo soy anti medicamentos me cuido en la alimentación, hago ejercicios y me leo todas las publicaciones que me llegan de salud y bienestar. Es mejor la prudencia y el conocimiento.
Efectivamente lo que usted plantea, creo que con toda la razón, es evitar sobre actitudes de enjuiciamiento y de indicación terapéutica, sin sopesar con una cuidadosa exploración clínica y la suficiente información con una buena comunicación e intento de disminuir la posible ansiedad y temor del paciente, respecto a los síntomas y criterios de posible riesgo vital, que el paciente presentara en la exploración y correcta observación y comunicación con él.
Sin dejar de admitir algún error de interpretación, la actitud pensada y analizada con suficiente tiempo entre el paciente y el médico que le atienda es generalmente la más conveniente y positiva para los pacientes en situaciones de incertidumbre
En mi opinión es una nota clara y precisa sobre el no apresurarse con un leve síntoma. Esta nota confirma mi precaución antes de tomar decisiones rápidas. Es claro en su lenguaje y en sus ejemplos. Según qué situaciones… lo mejor es esperar. Gracias
Según mis principios hay que darle tiempo al tiempo y no precipitarse, pues la medicina hoy solo es lucro
Me parece fantástico que se planteen y comente este tipo de reflexiones para que sobre todo se tome conciencia de lo que está sucediendo actualmente: las grandes industrias farmacéuticas y sus políticos que los apoyan están llevando a la confusión al ciudadan@ manipulando información acerca de la medicina natural y alternativa negando su eficacia y curación que ha existido toda la vida, para mantener así sus interese y ganancias. Todo se puede complementar tanto un tipo de medicina como la otra respetando lo alternativo y no demonizar nada hay muchos profesionales médicos y sanitarios que están dispuestos a trabajar con ambas medicinas! Los que no lo estén que no lo hagan pero que respeten a los demás!
Me ha gustado el mensaje de hoy lo veo muy acertado.
Estoy de acuerdo.
Personalmente me resisto a ir al médico, salvo roturas o evidencias de gravedad.
También soy contrario a medicación no natural.
Pero me veo rodeado de personas que piensan lo contrario.
Saludos y gracias por su esfuerzo
Muy interesante sus consejos.
Nosotros por temor nunca esperamos y siempre corremos a los hospitales para que nuestros familiares sean tratados con urgencia.
Estoy de acuerdo con los consejos y creo que lo más probable es mejor esperar
A mí me parecen bien los consejos y sugerencias que hay en este artículo, así como el mensaje en general. Lo ideal sería saber uno mismo medicina o al menos lo más posible, así podría entender mejor sus problemas de salud y los de su familia, así como entenderse con los médicos. Pero claro esto es una situación ideal nada fácil que se dé en la realidad. Así que el artículo está bien. Tomar las cosas con calma, reflexión y prudencia. Gracias por todo.
Totalmente de acuerdo
Un artículo muy importante y muy bien explicado. Si, a veces corremos el riesgo de precipitarnos y empeorar la situación. Me ha gustado mucho el ejemplo del médico que ante su enfermedad, sabe esperar y observar. Muchas gracias.
Me parece muy adecuado y razonable.
Estoy de acuerdo en que en una mayoría de casos lo mejor es esperar y dejar actuar a la naturaleza de cada persona. Pues ya lo decía Hipócrates «La naturaleza es el mejor médico pues cura en la mayoría de los casos y nunca habla mal de sus colegas».
Encuentro interesante su disertación y llego a la conclusión de que sería en los centros hospitalarios donde se deberían ver estas preguntas en la sala de espera y la posibilidad del enfermero de turno que pudiese ayudar a tomar decisiones tranquilas y sin precipitación.
Entraríamos pues en la fase didáctica de la medicina hacia los enfermos, que no es cuestión menor en un mundo que abusa de la rapidez y precipitación en todos los campos de actuación vital y creo que el MAS VITAL DE TODOS ES LA SANIDAD.
Estoy de acuerdo. La espera es lo más prudente. Yo tengo experiencia en ello, el organismo es muy sabio. Lo mejor dejar q hable.
Gracias por toda la ayuda q dan sus escritos
A mi perra de 13 años (american stanfford) y 30 kg de peso ,a raíz de la rotura del ligamento cruzado de la pata posterior izquierda , el veterinario le ha diagnosticado (después de una ecografía) un osteosarcoma (cáncer de hueso en la cadera) y por supuesto no la puede operar del ligamento cruzado. Ha ofrecido como alternativa, amputación de la pata y quimioterapia. Nosotros no estamos por la labor de hacer sufrir a la perra. Está perfectamente bien, come con mucho apetito, aunque cojea por la pata.
Me gustaría que algún veterinario me diera su opinión.
Mi comentario es sobre la necesidad de que una revista como esta incluya en sus páginas una sección de consultas y comentarios de los suscritores sobre las dudas que generan los temas tratados, en relación con la propia situación físico-anímica de cada uno, así como de sus experiencias y vivencias personales. Creo que beneficiaría mucho a sus seguidores y suscritores y como consecuencia a la propia revista que vería así aumentada su penetración y el número de suscripciones.
Participo con este comentario sobre lo que habéis propuesto, para transmitiros que el sentimiento que me ha generado la lectura del mismo es el de «desconexión» con la línea digamos editorial o filosófica de vuestra empresa o publicaciones, ya sean digitales o papel.
Porque mi opinión al respecto de lo planteado es que, ni el médico del actual Modelo de Sociedad y Desarrollo Sabe lo que debía saber sobre «La Salud» ( Si sobre la enfermedad y los medicamentos o tratamientos más o menos invasivos, dado que están en la pura Alopatía, sometidos por quien paga) -estoy casado y vivo esa realidad durante más de 27 años con mi pareja y madre de mis hijos, especialista Doctora del Sistema y en el Sistema, se de lo que opino al respecto-; ni que la espera ante cualquier situación sintomática es o pueda ser la solución o la respuesta más comprometida o eficaz.
Básicamente porque ese supuesto de si hay que esperar, ¿si o no?, ¿más o menos?, ¿por prescripción o no prescripción médica?, ante cualquier síntoma, es en si mismo inadecuado.
Porque si partimos del hecho que los síntomas -en definitiva como cualquier reacción, ya sea física, química…o metafísica-, no son algo aislado, que ocurran o acontezcan por generación espontánea, sino que responden y se corresponden con hechos anteriores, ya sean estos debidos a acción u omisión; consecuentemente lo más importante o necesario ante los síntomas -cualesquiera que estos sean-, no será el saber, conocer o intuir, si lo más aconsejable o conveniente es el esperar o no, o el sentirse mejor o peor con un diagnóstico u otro médico, ya sea realizado desde el cansancio, el hartazgo sistémico, la ignorancia, la ineficiencia, la falta de tiempo y atención…, o cualquier otra de la muchas razones y situaciones que rodena al hecho y función médica de nuestros sufridos y «colaboracionistas también» doctores, licenciados o ¡farmacéuticos! del actual sistema basado, no lo perdamos de vista, ¡¡¡económicamente en la Enfermedad como necesidad de la que procede la Rentabilidad del Sistema!!!
Lo más importante, opino, ES Y SERÁ cada vez más la necesidad de adquirir el conocimiento y LA CONCIENCIA SOBRE ELLO, para alcanzar hábitos y costumbres, tanto a la hora de alimentarnos como de cualquier actuación en la que ponemos nuestra Salud en juego, que permitan la Prevención, la Salud y la Conciencia de ambas como fundamento de nuestro Ser y Estar aquí.
Con ello, los síntomas, pasan a ser algo identificable, PREVISIBLE, consecuencia de lo que, Conscientes de nuestros actos y sabedores y honestos en nuestro proceder alimenticio y de cualquier orden, hemos hecho con anterioridad o hemos omitido hacer, ya sea por capricho, necesidad o deseo.
Igual no es la respuesta u opinión que buscabais sobre lo expuesto y cuestionado, pero podéis estar seguros que es la respuesta que he necesitado transmitiros…, por si igualmente os puede servir de algo.
SALUD-OS sobre todo!!!
Modesto U.
Si estoy completamente de acuerdo con sus ideas. Estoy muy contenta de tener contacto con Usted, ya varios años acà.
Gracias.
Definitivamente muy interesante la pedagogía sobre la salud contenida de esta comunicación. Gracias por contribuir con nuestra formación en materia tan delicada como lo es la salud.
Exponen un dilema en el caso del padre. Si no tienes conocimientos médicos no puedes elaborar un diagnóstico. Si no vas con el niño a urgencias y resulta que ese dolor es una peritonitis y por atrasar la visita médica el niño se te muere, tendrás el resto de tu vida un problema grave de conciencia.
Es el mismo problema con que se puede encontrar un médico que siempre teme el fracaso y se » cura en salud » a la hora de recetar un tratamiento o un acto médico. El miedo es el protagonista de la historia, la ignorancia la otra cara de la moneda de aquellos pacientes que creen que el médico no les ayuda ya que su patología no lo aconseja. A veces esperar es perder un tiempo precioso, no esperar es buscarse complicaciones…..
Me parece vuestra opinión un claro mensaje de quietud y prudencia a aquellos padres que suelen ir al mínimo síntoma de inquietud acudir a URGENCIAS. Craso error por muchísimas personas, soy prudente y manifiesto mi total adhesión a los profesionales de la salud que trabajan en horarios totalmente tensos como es el servicio de Urgencias hospitalarias.
Me remito justamente a mi caso personal que ocurrió en mi ciudad donde resido ( Valencia) acudí a URGENCIAS del hospital 9 de Octubre por fuertes dolores abdominales que me aquejaban con un intervalo y una secuencia constante, digamos cada 20/ 30 minutos, al ser atendido por el médico de turno y explicarle mi caso, previo a la exploración médica, solicitó las pruebas necesarias para darme un real diagnóstico, cosa que duró casi más de tres horas y en lo cual yo pensé en su momento que estaba perdiendo el tiempo, transcurrido el tiempo de análisis, placas, TAC me diagnostican que tenía las paredes del sistema gástrico engrosadas y por consiguiente me enfrentaba a un temible cáncer de estómago.
Digo esto y explico este comentario, a tenor de lo tan bien explicado y redactado por la opinión médica de la página de SALUD -NUTRICION Y BIENESTAR que no debemos alarmarnos y mucho menos auto medicarnos, estamos siempre en manos de la ciencia médica y nos debemos a ello, obviamente y claro está que la ciencia ni nadie es perfecto, todos estamos inmersos en el error humano,. Han pasado casi 8 años y me mantengo con una salud bastante superada, pese a sus limitaciones pero he superado el cáncer.
Desde ya mi ENHORABUENA a esta página de salud que la considero MAGISTRAL.
Un cordial saludo // Roberto P.
Estoy totalmente de acuerdo, pero muchas veces la juventud y la inexperiencia nos ha llevado a la urgencia.
gracias
Muy interesante, problemas así ocurren en la mayoria de situaciones, gracias.
No siempre es fácil la decisión.
A los 7 años, casi muero por peritonitis a raíz de una apendicitis aguda. Si mi madre o el médico del pueblo hubiesen esperado al día siguiente, hoy no estaría escribiendo esto.
Gracias por vuestras valiosas aportaciones.
Estoy de acuerdo con este artículo. Por suerte y digo suerte y no desgracia porque a través de mis 77 años he pasado por muchas enfermedades (peritonitis aguda, tuberculosis, sinovitis inespecífica en rodillas, cáncer de próstata, tumor benigno en hipófisis, angina de pecho) y siempre he procurado, medicarme lo menos posible, tomármelo con calma y confiar en los profesionales, además de procurar remedios naturales. Ahora estoy intentando dejar el Omeprazol pues tengo hernia de hiato y aquí sí que discrepo con la medicina tradicional.
Sí estoy de acuerdo en que no hay que precipitarse, muchas cosas no tienen importancia, por un dolor de tripa o un malestar sin más no hay que ir a urgencias.
Se tendría que aprender a conocer nuestro cuerpo, saber preguntarle y escuchar su respuesta, y así se irá muy poco al médico.
Gracias por todo lo que estoy aprendiendo. Un saludo. Concha.
Totalmente de acuerdo con el artículo. Lo que ocurre es que, en general, hay mucha incultura sobre la salud y muchos «cuñados sabelotodo expertos en salud».
Hoy día no tenemos paciencia para nada y, ni siquiera para esto. La mayoría de los dolores y malestares se pasan solos y sin medicación. Todo el mundo tiene algún malestar de vez en cuando y no hay que correr ni preocuparse por ellos.
Estamos demasiado pendiente de nuestro cuerpo.
Todos los médicos q me han tratado han sido fieles a su juramento hipocrático: lo primero es no hacer daño.
Por desgracia he visto como han acabado con mucha gente, inclusive mi propio padre, espero que la gente se conciencie en hacer caso a su propio cuerpo, si hay síntomas extremos de dolor o evidencia de que algo anda mal, entonces habrá que tomar medidas, y hacerse chequeo de la posible causa, no basta con una prueba, hay que acudir a mas médicos y pruebas, solo cuando se esté seguro del resultado de las múltiples pruebas que realmente demuestren la causa del problema, entonces la última decisión la tiene usted de cómo abordar el problema.
Hoy en día vivimos un negocio tremendo a costa de la salud de la gente, las farmacéuticas son pura mafia, y el sistema de la medicina tradicional es corrupto en toda su totalidad, no se puede vaciar a una chica de 22 años de útero, bazo y parte del estómago por el hecho de que estuviera invadida de tumores cuando la seguridad social no quiso intervenir y tampoco dio ningún tipo de solución, porque hay otras alternativas naturales en las cuales no creen o no les interesa transmitir.
El resultado dejar arruinada a la familia sabiendo que esa no es la solución, al mes falleció, lo que ya sabían, sin órganos no se puede vivir.
En la medicina china siempre curan de dentro hacia fuera, van a la raíz del problema y siempre intentan curar a base de hiervas, la alimentación y solo en un caso muy extremo recurren a la cirugía. Espero que les sirva mi razonamiento y experiencia como para poder reflexionar sobre lo dicho.
Salud para todos
Totalmente de acuerdo. Muchas gracias.
Estoy de acuerdo que es mejor esperar y ver cómo evoluciona el malestar, si es para mejor seguir observándolo y si se torna peor recién acudir a un especialsta.
Me parece una reflexión muy buena, la tendré presente.
Por supuesto, que estoy de acuerdo, que las precipitaciones nunca son buenas, aunque depende del caso
En general, parece correcto lo que dice, no obstante, habrá que sospesar con cuidado,porque una taquicardia, ictus o embolia no deja mucho margen de tiempo, como usted sabrá.
Hace un año tuve un problema ginecológico. A causa de un quiste, creo, al final no me quedó muy claro, la regla me duraba más de dos semanas. Fue al médico de cabecera y me pidió una ecografía de urgencia. Tenía un mioma y quistes en los ovarios. Me remitió al ginecólogo que en cuanto vio la ecografía me pidió una operación de urgencia en la que me aconsejaba extirpar el útero y los ovarios para la semana siguiente. Al día siguiente la regla remitió y me fui a otro médico, anulé la operación, fui a otro ginecólogo y otra ecografía. A los seis meses la volví a repetir. El mioma no crece y los quistes se reducen. Aún conservo mi útero y mis ovarios y mis reglas han vuelto a ser normales. Es cierto que no hay que asustarse y no precipitarse porque a veces el cuerpo se desequilibra, pero él solo vuelve a restablecerse.
Estoy totalmente de acuerdo que precipitarse no es bueno, ni sabio. A veces con pequeños remedios puede ir tirando. Creo que hoy en dia se urgentiza demasiado. Voto por la prudencia y sobretodo por escuchar al paciente y que el paciente se exprese libremete escuchando su cuerpo y reacciones. De pacientes tambien hay de muchas clases, hay el pasota y optimista y el que todo le urge ya. Desde luego no es fácil tomar decisiones cuando te juegas la salud y la vida. A veces una tonta y no valorada decisión te arruina la vida. La misma responsabilidad tiene el paciente como el médico. Y si el paciente toma una decisión contraria a la del médico creo que también se tiene que repetar.
Estoy completamente de acuerdo. Nuestro cuerpo se puede curar solo de la mayoría de las dolencias. La prevención exagerada puede llevar a la pérdida de la salud que queremos conservar. Lo sé porque fui operada mas de una vez de cáncer de mama, algo imperceptible que solo se descubrió por las mamografías. Me arruinaron los brazos al extraerme los ganglios, ahora siempre tengo dolores en la musculatura. Hace 7 años me querían operar nuevamente por nuevas lesiones descubiertas en las famosas mamografías, obligatorias en mi país (Uruguay). Tuve la suerte de que llegara a mis manos una copia de un libro del Dr. Hamer, sobre la génesis del cáncer. En tres días resolví no operarme y curarme sola. Ese libro cambió mi vida. Dejé los medicamentos y a los médicos. Tengo ya 80 años y estoy mejor que hace diez años.
Mi experiencia personal me enseña que antes de ir al médico hay que revisar qué es lo que uno está haciendo mal en su vida diaria: ¿estoy comiendo sano? ¿Mucha verdura, frutas legumbres, y 0 de alimentos procesados? ¿Poca sal y azúcar? ¿Duermo bien? ¿Mis intestinos se limpian a diario? ¿Cómo son mis orines? Tintos? ¿Me muevo lo suficiente? etc. etc. Tenemos que cuidar nuestro cuerpo mejor que a nuestros automóviles porque si no nos quedaremos un día «en panne» en media calle…
Creo que este tema es muy importante que bien pudiera enseñarse desde la Escuela Básica, de cómo aprender a conservar y cuidar de la salud, porque este tema es fundamental, de vida o muerte, para saber explicar y decidir, cuando se produzca el caso de requerir visitar un médico o realizarse un procedimiento para mantener la salud. Educar para la salud, en primer lugar, sería tan o más importante que aprender las demás ciencias, porque a la persona, le va a servir para mantener una vida prolongada y con buena salud.
En líneas generales estoy bastante de acuerdo con esos argumentos. Pero el problema es que en nuestra sanidad no se tratan enfermos ni siquiera enfermedades, se tratan síntomas y asi es mucho más fácil cometer errores. Los médicos estan muy presionados y priman los intereses económicos sobre cualquier otra consideración. Además la mayoría de los medicos sirven a los intereses de las farmacéuticas y entonces todo se complica más. Creo que el gasto en pagar a tantos profesionales quemados y que son máquinas de seguir protocolos y expender recetas es innecesario. Espero en todo caso que algun día esto cambie. Las enfermedades raras, los tratamientos verdaderamente interesantes cada vez son retirados del sistema público. Algunas terapias alternativas no son incluidas cuando a la larga darían felicidad a muchas personas que son como ellos (los médicos que se creen en un mundo aparte, decidiendo sobre lo mas valioso, la mínima calidad de vida que toda persona debe tener). Si no estan de acuerdo por qué no protestan. Son los guardianes más fieles de este sistema político social que hoy padecemos.
Espero que en este terreno haya también alguna revolución.
Estoy de acuerdo en que uno mismo no pierda la cabeza y tampoco crea que la solución más rápida es operación o medicamentos.
Démonos un tiempo para asimilar el diagnostico que nos dan tanto, familiares como médicos.
Llegue a urgencias una noche, después de dos Sin poder dormir, con síntomas de que me falta la respiración y sensación de asfixia.
Después de tres horas de pruebas y esperas, llego la doctora y me dijo que tenían que ingresarme, porque tenía los riñones al 16 % y era crónico. Siguieron haciéndome pruebas y después de dos horas más me sacaron que el corazón funcionando muy deprisa uno de los ventrílocuos bombeaba poca sangre.
Me dijeron que tendrían que hacerme un cateterismo, con el riesgo asegurado que perdía los riñones al hacer la prueba y pasaría a diálisis.
Se pueden imaginar ustedes el bajón y mal estar que pille yo con la noticia.
Yo que no había pisado un médico en treinta y seis años ni para un simple dolor de cabeza.
Me negué a hacerme la prueba puesto que no quería perder los riñones.
Sin tener síntomas ni dolores de riñones ni corazón.
Me pusieron un tratamiento y probieron por medio de una dieta de comer la mayoría de todas las comidas.
Después de mes y medio en otra revisión, me dijeron que había recuperado un 4%.
Seguí con el tratamiento, aconsejado por los médicos que tenían que hacerme el cateterismo para ver que tenía en el corazón, pero asegurándome que perdería los riñones en la prueba, me seguí negando.
Después de dos meses más, después de pruebas y analíticas.
Me dijeron que había recuperado un 10 % más.
Estoy en el 30% ya y sigo dándome tiempo para mi recuperación para que me puedan hacer la prueba del corazón Sin riesgo a perder los riñones.
Pido perdón por todas las faltas de ortografía que puedo tener.
Pero si hubiera hecho caso a médicos y familiares, yo estaría en diálisis y esperando a trasplante de riñón.
Espero os sirva de algo mi comentario y yo, mi total recuperación.
Os pediría si tenéis algún remedio natural que me pueda ayudar en algo Sin dañarme me encantaría saberlo un saludo a todos.
La verdad que los mensajes son interesantes, uno aprende y agradezco que me los envíen, muchas gracias. Les deseo que sigan con esa labor, un abrazo.
Totalmente de acuerdo!!, en mi opinión , la salud es tan importante que el tiempo de espera invertido para conseguirla y evitar hacer daño es irrelevante.
Me ha gustado mucho el artículo, muy interesante. Totalmente de acuerdo con él. Gracias
Creo que es cierto que las «urgencias» no siempre son buenas, pero el caso que comenta, un niño que esta sin aliento… no da más datos de la cardiopatía que podía tener, yo aunque soy médico, no soy partidario de la cirugía salvo que sea necesario y única alternativa, pero en este caso aunque al niño le gustara la música y leer… creo que la evolución hubiera sido fatal en cualquier caso y entonces se habría dicho: ¿y por qué no lo operaron?
Totalmente de acuerdo en la espera prudente. En mi propia experiencia, he podido comprobarlo concretamente con el ginecólogo, en revisiones anuales sucesivas, observamos pólipos, miomas e hidrometras endometriales claramente presentes, como opciones intervenir y extirpar o esperar y observar, decidí lo segundo y tras un año, todo desapareció actualmente y despúes de años sin problema alguno. Gracias por las informaciones, muy útiles y sensatas.
Completamente de acuerdo. Gracias por el artículo y lo he compartido, incluso con médicos que me han manifestado su conformidad.
Totalmente de acuerdo.
Durante este invierno he pasado un resfriado muy fuerte con mucha tos que no se me acababa de marchar. Tomé antibióticos y ya estaba tan harta de medicación jarabes, paracetamol, inhaladores… Yo tengo bronquitis asmñatica y tenía sintomas parecidos a cuando tuve la neumonía en el Año 2000, por eso tenía más miedo y la tos no se me acababa de marchar hasta que vi vuestro articulo «el jarabe que toman los cantantes». Sin nada que perder fui a comprar raíz de malvavisco y me hice el jarabe, recuerdo que al principio la tos no marchaba pero cuando estaba empezando el segundo frasco, se me fue de golpe, y luego al cabo de unos meses que volví a resfriarme lo hice otra vez y también me alivió. No tenía nada que perder y me fue muy bien y eso que la Fluidasa siempre me había aliviado pero estaba tan cansada de tomar medicación que decidí probar con muy buen resultado. Gracias por vuestras informaciones.
Me parece muy acertado su consejo dado a que yo me encuentro en situación muy parecida y esto me ha tranquilizado, muchas gracias (como siempre sois muy útiles para vuestros lectores).
Siendo este un tema de vital importancia por la responsabilidad de padres o por la responsabilidad personal, no deja de ser una barbaridad lo que se ha convertido la medicina preventiva. Es ésta una situación que revierte negativamente sobre la propia salud y sobre la misma esencia de la medicina. En la mayoría de las ocasiones el propio cuerpo ejerce la auto curación, basta con hacerle un poco caso, y con ello evitamos pruebas inútiles, costosas y perjudiciales para la misma salud y además aprendemos que no todo es ir al médico cuando la medicina, tal y como está planteada es un negocio de inmensas proporciones. Es necesario decir que tiene cosas muy buenas y que hay verdaderos doctores que intentan curar, y a veces lo consiguen.
Completamente de acuerdo, pero si que es verdad que cuando una persona no se encuentra bien los nervios le superan y es muy dificil quedarse tranquilo y esperar las decisiones de nuestro cuerpo. Estaría muy bien que aprendiéramos a tener paciencia pero es muy complicado. Muchas gracias por todos sus artículos.
Totalmente de acuerdo con el artículo
Me parece correctísimo su consejo.
ENHORABUENA. La semana pasada recibí una carta del servicio de salud para realizar una encuesta. A los 8 días me llamaron por tlf y respondí las preguntas .Todas mis respuestas coinciden con. El E-Letter que acabo de leer. Muchas gracias por ayudarme a tener un criterio razonable
Sí, estoy de acuerdo. A medida que he ido cumpliendo años me he ido dando cuenta de la importancia que tiene conocerse a uno mismo, por un lado, y no precipitarse ante la aparición de un síntoma, por el otro. En Japón dicen que el mismo tiempo que tarda una enfermedad en manifestarse, tardará en desaparecer (más o menos), por lo tanto, la precipitación a la hora de abordarla no va a suponer una gran ventaja y, sin embargo, puede suponer un gran perjuicio si la elección es errónea.
Hola
Yo tampoco soy muy partidaria de las prisas, claro que resulta difícil evaluar si hay prisa o no sin ser médico… Y confiamos en ellos…Quiero decir que cumpliendo años he acabado por comprender que en medicina también hay modas. Eso debería ser así?
A principios de los 80′ entré en un consultorio ginecológico para una visita rutinaria y 10 minutos después me mandaban a casa con todos los volantes para las pruebas preparatorias para extirparme ovarios, matriz y útero. Tenía 27 años recién cumplidos. Soltera y sin hijos…
Por suerte no me asusté y pedí hora urgente en un centro especializado y allí me confirmaron que tenía un ovario poliquístico, que por otra parte nunca me había dado ningún problema, recibí un tratamiento y conservé todo mi cuerpo hasta los 52 años en que finalmente acabaron extirpándome todo.
Y todavía me pregunto: era necesaria esta vez la cirugía? Los miomas de antaño seguían exactamente en el mismo sitio e igual tamaño, 30 años después. Los quistes se habían reducido a la mitad pero un ovario había desarrollado lo que los médicos llamaron un «borderline» un quiste precursor del cáncer que un año después seguía exactamente igual que cuando me lo diagnosticaron. Y seguía indetectable en sangre 3 días antes de la operación.
Después, comentando la cuestión con amigas, me di cuenta de la cantidad ingente de mujeres en la treintena que habían sido operadas en aquella época y por lo tanto esterilizadas de por vida sin otro diagnóstico que algunos quistes o miomas benignos.
Operadas tanto en la Seguridad Social como en la privada (como en mi caso).
Se ha hablado mucho de las consecuencias de tomar la píldora anticonceptiva. Pues bien, a principios de los 80′ muy pocas mujeres habían tenido acceso a ella durante un tiempo suficiente como para sufrir sus consecuencias más funestas. Pero en cuando te acercabas a un consultorio y decías que la tomabas, por lo que he comprendido de mi caso y otros, eras la perfecta candidata a la esterilización. Tomar la píldora, para los médicos viejos de la época era sinónimo de mujer que no quería tener hijos, de vida disipada… y eso parece que daba derecho a la esterilización cautelar.
He comprendido que esperar un poco ante una solución tan invasiva como una operación quirúrgica se revela indispensable, porque la ciencia avanza, sí. Lo cual quiere decir que el diagnóstico y su solución del día de hoy será el error médico de mañana cuando la propia investigación se supere a sí misma.
Pero cómo saber si puedo esperar? Cuánto tiempo y síntomas sería lo razonable?
Si, muchas veces actuamos de forma equivocada porque al sentirnos mal tenemos miedo y ese miedo no nos deja pensar con claridad.
Totalmente de acuerdo con sus apreciaciones, en cómo actuamos la gente por el mero hecho de tener un síntoma y querer descartarlo casi de inmediato. Eso es un fallo del ser humano que quizás se trate de falta de confianza cuando el estrés te domina.
Estoy completamente de acuerdo, no hacen falta mas comentarios
Estoy totalmente de acuerdo en que las personas tenemos demasiada prisa por medicarnos y operarnos.Así que estos consejos suyos me parecen fantásticos. Soy osteópata y trato de aconsejar a las personas que atiendo lo mejor que puedo,así que sus publicaciones son de gran ayuda. Estoy suscrita a todas.
Gracias por compartir con nosotros sus conocimientos.
Totalmente de acuerdo en todo!
Así lo hago desde que me casé y tuve hijos. Sobre todo desde que mi padre murió en abril del 93!
A mis hijas siempre les daba masajes en su barriguita y remedios naturales siempre que los necesitaban.
Desde el año 2009 no tomamos medicación gracias a los productos de Exialoe.
Y si alguna vez hemos tenido algo más fuerte, con una sola pastilla hemos tenido suficiente.
Nuestros médicos de familia nos conocen perfectamente. Hemos tenido dos y el primero se jubiló.
GRACIAS por vuestra labor.
Hace 6 años me diagnosticaron cáncer de pulmón. La solución para el oncólogo era operar y extirpar el pulmón izquierdo totalmente, pues no había otra solución ya que el cáncer en el pulmón estaba en una zona de difícil acceso (también me dijo que no había posibilidad de cura ni con quimio ni con radio terapia (por suerte para mí!!!)… y hacerlo ya!!
Opté por ver otras soluciones… Había oído hablar del Dr. Hamer y su visión sobre el cáncer. Hablé con personas conocidas y una de ellas me recomendó un homeópata. Acudí a su consulta. Me trató mediante homeopatía y una alimentación según el grupo sanguíneo…
Y estoy aquí con mis 2 pulmones y curado del cáncer! El oncólogo todavía no se lo cree…
Lo importante es no entrar en pánico y sopesar todas las posibilidades al alcance que tenemos hoy en día!
Totalmente de acuerdo. Desde hace cuatro años, mi calidad de vida ya no es la misma, me sentí engañada por el cirujano. Yo tenía un nódulo en la glándula tiroides era benigno pero ya tenía un tamaño considerado por lo que él me recomendó que lo mejor era extirparlo.
Yo le dejé claro de que no era partidaria de tomar medicación y menos de depender mi vida de una pastilla, con lo cual me aseguró que solo me quitaría el nódulo y no tendría que tomar ninguna pastilla. Pero no fue así, me quitó toda la glándula alegando que en la ecografía que se me hizo antes de la operación, aparecía en el otro lado un nódulo que medía 0, .Que por si acaso dentro de X tiempo me hubieran tenido que abrir otra vez él tomó esa decisión sin contar conmigo y en una injusticia, en mi caso ha sido peor el remedio que la enfermedad.
Totalmente de acuerdo con su artículo.
Ahora una petición, por si me pueden ayudar. Tengo un hijo con una enfermedad autoinmune al que le daña el ALMIDON que contienen los alimentos (NO EL GLUTEN). Me podrían indicar como puedo eliminar en casa, y de forma lo más completa posible, el almidón de pasta, arroces…. etc.
Gracias anticipadas a todo el que me pueda echar una mano.
Un saludo.
Lo que más suele alarmar es la sensación de malestar o el dolor, tenemos (en general) poca soportabilidad a ello. Pero otras veces, cuando vas al médico y te pregunta: ¿Porque no ha venido antes? te desmonta.
Es muy difícil saber cuándo hay que salir urgentemente y cuando se puede esperar «a ver qué pasa». En casos de ictus por ejemplo, cuanto antes se intervenga mucho mejor ya que se puede revertir. En caso de meningitis, hay que salir de urgencia; esto, concretamente, me pasó a mí hace unos años con mi nieta; gracias a mi interés por la medicina y algunas nociones (básicas) de ella, pudimos adelantar en el tiempo el tratamiento de una meningitis vírica, afortunadamente.
Comprendo que hay que ser prudentes…..lo justo.
Entiendo que las personas a las que va dirigido este mail, es porque están interesadas como yo en este tema pero…….puede ser peligroso en caso de que lo lean personas sin conocimientos básicos. Un saludo.
Soy médico y estoy totalmente de acuerdo!
Estoy muy de acuerdo con su comentario.
Ciertamente me parece muy Sano todo ése Comentario que han hecho en éste Artículo tratado hoy. Además agregaría cuando los seres humanos nos encontramos en cualquier encrucijada queremos que nos atiendan YA sin considerar que adelante de nosotros hay muchos otros Casos lo cual empeora nuestra tensión Nerviosa y hace más grave la situación.
De todas formas el Ser Humano es un Conjunto de situaciones bien complejas por resolver y, todos éstos Temas AYUDAN en gran medida a comprender y a prestarle mayor atención a nuestro YO REAL para aterrizar en lo que más nos conviene, así como también la AYUDA que cada Profesional puede brindarnos para conseguir una adecuada Homeostasis en nuestro DIARIO VIVIR y Coexistir. Mil Gracias.
El problema es que vivimos en la era de la inmediatez y la impaciencia…
Estoy bastante de acuerdo de no estar totalmente seguro o sea de suma urgencia, en
Esperar, analizar, pensar y definirse previamente
Muy buen artículo,
Cordial saludo
Personalmente creo que lo más practico es, tener sentido común, analizar los pro y los contras, y luego decidir.
Inconscientemente, y digo esto porque no soy médico, ni tengo una relación estrecha con la medicina; lo que sí sé, es que llevo practicando este sistema toda mi vida, si tengo algún malestar espero antes de acudir a la consulta por lo que a la larga no tengo que ir. Me imagino que será que no he tenido motivos importantes, pero hay enfermedades, que no pueden esperar. Un profano en la materia, en mi opinión no debería esperar.
«Ante cualquier dolencia, el mejor remedio… paciencia ! «
Muy de acuerdo con este comentario.
A veces es más prudente esperar.
Otra cosa es la saturación de Urgencias por la demora en poder dar una cita para su médico de familia, ante lo cual, el mismo paciente se deriva él sólo a Urgencias.
Estoy totalmente de acuerdo en ello. Las cosas hay que sospesarlas en frio, en caliente se tiende a no acertar adecuadamente.
Tengo 67 años .siempre me ha gustado el deporte y la salud (cosas q hago y estudio).
Desde muy joven grave en mi mente esta frase.
“No temas ir despacio, solo teme no avanzar».
Gracias por toda la información que recibo.
Guillermo.
“La enfermedad » nos está dando información respecto a necesidades de cambio en nuestra vida. Estoy de acuerdo con su comentario.
Muy bueno y necesario intentar que la gente vuelva a ser responsables de si mismos y no delegar TODO en los médicos, los gobiernos, la sociedad….En mi país de origen se decía: Lo que viene sólo, se va sólo. Tiene su sentido, pero para ello es preciso tener conocimiento e información adecuada y verídica. Asunto complicado en nuestra actualidad, donde impera una perfecta manipulación a favor del enriquecimiento de pocos. Es así con las prácticas de la industria farmacéutica, alimenticia y el perfecto desconocimiento y desinterés de la mayoría de los médicos.
Casi todo se sabe desde Hipócrates, pero esto no interesa. Sólo se quiere vender. No curar. Sí, se debe esperar, escuchar a su propio cuerpo, su sabio organismo: es nuestro verdadero médico interior y perfectamente diseñado para auto-curarse, siempre y cuando lo tratamos bien con viveros orgánicos, agua pura etc.etc.
Al médico sólo en última instancia. Y preferiblemente al alternativo, holístico, ya que nunca una «enfermedad» es sólo del cuerpo, si no tiene orígenes emocionales, espirituales, mentales. En fin, el artículo de Luis Miguel es muy, muy necesario para cuestionar lo absurdo de la actual situación. Es necesario para reflexionar y profundizar cada uno de nosotros en la razón y sinrazón, informándose sobre temas de vital interés en lugar del fútbol, como ejemplo. Mi enhorabuena y agradecimiento.
Como deben tener constancia vdes. me he interesado mucho por la medicina últimamente, la prueba es que tengo todos los libros que han publicado y que son verdaderas obras de conocimiento de la salud, huyendo siempre de medicamentos tradicionales y que presentan problemas.
Muchas veces gracias a la paciencia he logrado solucionármelo solo o acompañado de pequeños ayudantes como son las infusiones, masajes, aromas,etc. aunque considero que alguna vez vistos los síntomas graves que puede presentar la persona, no hay que perder tiempo en pruebas y lo más aconsejable es ir a urgencias o al cap de la población.
Me siento plenamente identificado con la reflexión acerca del ímpetu con el que algunos pacientes, o responsables de pacientes, exigen al profesional de la salud un rápido diagnóstico y una, aún, más rápida intervención, cuando, en múltiples ocasiones, estás exigencias rompen la buena gestión sanitaria convirtiendo la médico en un expendedor de pruebas que tienen que ver más con satisfacer la impulsividad del demandante que con el protocolo sanitario. Por ello, dejemos que el profesional marque el camino, que en la mayoría de las ocasiones, será el más acertado.
Hola y muchas gracias por su trabajo para informarnos. Pues les cuento en muchos casos es mejor esperar con prudencia claro, mi caso fue que por una fractura del radio se me corto el tendón largo del dedo pulgar y no ejercía el movimiento de la primera falange pues me dijeron que tenían que intervenir con cirugía, cuál fue mi sorpresa que a los dos meses me citan para quirófano y cuando me ve la cirujana nos damos cuenta que mi dedo funciona correctamente.
Su explicación fue que el cuerpo por si solo se solido con el tendón de al lado y no me operaron
Tenéis toda la razón, el problema es que cualquier persona debería interesarse para obtener unos conocimientos básicos. yo se diagnosticar una apendicitis y también una taquicardia y hacer un masaje cardiaco y respiratorio. Me dolería mucho que una persona muriera en mis brazos por mi ignorancia.
Llevo arrastrando problemas de migraña hace ya veinte años, me recetaron sumatriptan para las crisis, y he probado varios tratamientos sin ningún resultado, sólo un médico naturópata consiguió que mejorara algo con dieta, acupuntura y homeopatía.
Me resisto siempre a tomar el sumatriptán y aguanto y aguanto, hasta que es insoportable, pero ya he conocido dos casos de personas, que, como yo, solían aguantar para no tomar el medicamento y una murió en coma, la otra sobrevivió al coma milagrosamente, los familiares me han metido miedo y me han dicho que no espere, que tome el medicamento en cuanto aparece el dolor para que no me ocurra lo mismo.
Los efectos secundarios del medicamento son devastadores a corto plazo, no quiero ni imaginarme lo que será a largo plazo, a veces, uno no sabe si esperar o no, pero el dolor es el que manda.
Gracias por leerme,
Es mi opinión que a veces es mejor meditar en lo que necesitas en primer lugar. Si no hay un dolor intenso que condicione la actuación creo mejor esperar al médico de cabecera y plantearle a él el problema y no presentarse en urgencias por lo dicho. Allí hay muchas posibles infecciones y no es un lugar para pasar el rato.
Además con los medios actuales se puede hacer una consulta via teléfono o semejante para evitar colapsar los sistemas de atención médica.
Lo mejor es esperar a no ser que la situación exija una actuación de urgencia.
Buenas tardes: Muy interesante todo, pero el significado de Primun non nocere, no es no hacer nada sino, lo “primero es no hacer daño” que es lo que estoy seguro intentan hacer los médicos. Muchas gracias por sus artículos.
En general estoy de acuerdo. Todos tenemos unos informes anteriores a lo que se avecina, y en caso contrario es cuándo tendremos que recurrir a Urgencia comunicando todos los síntomas que observamos.
Eso sí las prisas nunca han sido buenas consejeras
Estoy en total acuerdo de que hay que esperar, pero la ignorancia y desinformación nos empuja a temer
Lo mejor es esperar un poco e interna ligar bien la decisión que se va a tomar
Yo quisiera saber por qué no se ha tenido en cuenta esta calma antes de decidir sobre qué hacer con un enfermo con las «vacunas» del COVID y se han administrado a la población a discreción, sin evaluar a cada uno.