Tengo que confesarle que desde hace unos días sufro un pequeño episodio de depresión otoñal, algo muy común por estas fechas.
Y es que, con la llegada del otoño, no sólo caen las hojas de los árboles; a veces nuestro estado de ánimo también está por los suelos.
Parece que nos falta energía, vitalidad, ganas de hacer cosas… ¿A que usted también lo siente?
Como le digo, es un trastorno relativamente frecuente y no hay por qué avergonzarse.
Pero tampoco hay que tomarlo a la ligera.
La depresión otoñal obedece al final de la época estival y al cambio de estación: los días son más cortos, se nota la bajada de temperaturas, llegan las primeras lluvias, los días grises…
…y de repente, cuando el panorama es de lo más deprimente…
¡Subidón!
Existe una planta medicinal que ayuda a restablecer y mejorar el estado de ánimo en los trastornos estacionales.
Su eficacia para aliviar las alteraciones del sistema nervioso asociadas a la depresión leve o moderada está ampliamente comprobada.
De hecho, sólo con evocarla parece que ya me encuentro mejor, más positivo.
Porque sé que la depresión otoñal, un trastorno menor pero que en algunos casos puede llegar a ser grave, tiene solución sin medicamentos ni pasar por el psiquiatra.
Y esa solución se llama hipérico (o hierba de San Juan).
Voy a contarle como actúa para combatir y vencer esta patología que puede llegar a hacérselo pasar realmente mal.
A pesar de estar muy extendida durante esta época del año, no debe descuidarse.
Lo que empieza como una china en el zapato, con síntomas leves como estar de bajón, triste o apático, puede derivar en un estado más profundo e incluso incapacitante.
Y en la misma medida, a pesar de que este trastorno se diagnostica clínicamente en otoño, puede llegar a acompañarle más allá de esta estación.
Por eso debe ponerle freno desde los primeros síntomas, sobre todo teniendo en cuenta que los españoles tenemos una especial propensión a sentirnos deprimidos.
Puede que esto le parezca sorprendente, pero los datos no engañan:
Efectivamente, los datos son preocupantes y nos sitúan en el grupo de cabeza de trastornos depresivos en Europa, concretamente en el cuarto lugar según la OMS.
Pero no se alarme.
La naturaleza siempre encuentra soluciones para hacernos sentir mejor en los momentos más duros. Y cuando comience a sentirse deprimido, hay una planta que debe tener siempre en la cabeza: es el turno del hipérico.
El hipérico (Hypericum perforatum) también es conocida como hierba de San Juan, al creerse que sus propiedades sólo eran efectivas si era recogida el 24 de junio, día de San Juan, que coincide con la floración de la planta. (2)
Pero anécdotas aparte, las propiedades de esta planta medicinal están documentadas desde hace miles de años. Y aunque en la antigüedad incluso Hipócrates le atribuía función antiinflamatoria y Paracelso la usaba para tratar contusiones y heridas, hoy por hoy los estudios demuestran que es una excelente aliada natural en casos de ansiedad, depresión leve o moderada y alteraciones del sueño por estrés nervioso.
Sin ir más lejos, en Alemania las prescripciones de hipérico constituyen más del 15% del total de antidepresivos. Y para el tratamiento de las depresiones se utiliza cuatro veces más que el famoso fármaco antidepresivo fluoxetina. (3)(4)
¡Y estamos hablando de una planta!
Desgraciadamente, en nuestro país la pauta predominante ante el menor asomo de trastorno nervioso y depresión sigue siendo el pastillazo, previo paso por consulta; el método caro que enriquece a las compañías farmacéuticas, con efectos secundarios y a veces ineficaz. Algo que resulta incomprensible cuando la naturaleza nos brinda una joya como el hipérico.
Pero parece que la medicina oficial sigue sin saber (o sin querer saber) cómo funciona realmente esta planta medicinal y sus excelentes propiedades contra la depresión otoñal.
La depresión se relaciona con una menor disponibilidad de serotonina, dopamina y noradrenalina. Estos neurotransmisores son responsables de mantener nuestro estado de ánimo, por lo que su déficit conduce a la depresión.
Desde esta premisa, el efecto antidepresivo del hipérico se debe a dos mecanismos de acción:
Ambos mecanismos favorecen un aumento de la disponibilidad de los neurotransmisores y reafirman la capacidad del extracto de hipérico de tratar y disminuir la depresión. (5) (6)
La ciencia también ha demostrado que el hipérico ofrece una respuesta similar a la de otros fármacos antidepresivos habituales, como la imipramina, resultando seguro y mejorando la calidad de vida de los pacientes. (7)
Un metaanálisis reciente, en una revisión de 29 ensayos clínicos llevados a cabo con hipérico, concluye que su efecto es similar al de los antidepresivos de síntesis y sus efectos secundarios son menores. (8)
Y otro estudio, en este caso a largo plazo, confirmó su eficacia en pacientes con depresión leve o moderada y su seguridad tras un año de tratamiento con hipérico. (9)
Además, el extracto de hipérico se utiliza también para aliviar la ansiedad y los trastornos del sueño. (10)
Así, estudios in vitro sugieren que los compuestos del hipérico pueden interaccionar con los receptores que median los efectos ansiolíticos, como el receptor del ácido gamma-aminobutírico (GABA). (11)
Sres. Doctores psiquiatras:
¿Son necesarios más estudios científicos sobre las propiedades del hipérico?
¿Necesitan más pruebas de la eficacia de esta planta?
Estaría bien que la tuviesen en cuenta la próxima vez que un paciente con ansiedad o depresión leve o moderada llegue a su consulta.
Ya ha visto que el hipérico es efectivo contra el bajón anímico propio del otoño.
Para combatirlo usted puede adquirir la planta desecada en herbolarios y tomarla en tisana, aunque para aprovechar todas sus propiedades es aconsejable consumirla en forma de extracto estandarizado.
Como hago habitualmente a la hora de recomendarle complementos alimenticios, pongo el foco en laboratorios que hagan las cosas muy bien, es decir, que si usted decide tomar un complemento a base de hipérico para ayudarle a subirle un poco la moral, apueste por uno de gran calidad.
En este caso concreto es necesario puntualizar que en las plantas medicinales, como es el caso del hipérico, es importante la estandarización en sus principales sustancias con beneficio demostrado (principios activos).
Por tanto, un complemento a base de hipérico debe estar elaborado a partir de las sumidades floridas de la planta (partes superiores y flores), donde se sitúan sus principales principios activos, cumarinas, fitosteroles, flavonoides, naftodiantronas (hipericina). Además, según dos grandes manuales farmacológicos europeos, la Farmacopea francesa y el Deutscher Arzneimittel-Codex alemán, el extracto debe contener al menos un 0,04% de naftodiantronas calculadas como hipericina para resultar efectivo. (12)
El producto que hoy le recomiendo cumple con creces esta exigencia, ya que contiene 230 mg de extracto seco de sumidades floridas de hipérico y su titulación en hipericina es del 0,3% para garantizar su máxima efectividad.
Otra de las grandes dudas a la hora de optar por un complemento para aliviar la ansiedad o los estados de ánimo bajos y depresivos es cómo tomarlo y, sobre todo, cómo se deja de tomar una vez que nos sentimos mejor. Cuando se trata de fármacos antidepresivos, la recomendación es irlos abandonando poco a poco cuando se note mejoría y así lo establezca el médico. Sin embargo, con el hipérico estamos hablando de una planta que ni crea adicción ni requiere que usted lo vaya dejando poco a poco.
Una razón más para elegir este complemento de hipérico frente a los antidepresivos que puede encontrar en la farmacia.
En cuanto a su consumo, es de lo más práctico. Una cápsula diaria con un vaso de agua en la comida principal le ayudará en casos de:
Como siempre le digo, si está tomando cualquier tipo de medicación, y en especial antidepresivos, consulte con su médico.
Le animo a que empiece a disfrutar ya mismo del efecto de este complemento desde una nueva actitud más positiva.
Pídalo ahora en este enlace.
¡A su salud!
Felipe M. Miller
Fuentes:
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Un artículo bastante interesante, es muy bueno saber la opinión de las personas y el concepto que tienen sobre los especialistas.