Los ácidos grasos omega 3 reducen la toxicidad ligada a la quimioterapia, según un estudio llevado a cabo en 61 pacientes afectados por cáncer de esófago(1).
Durante la investigación un grupo de pacientes que estaban siguiendo el tratamiento con quimioterapia tomaron 900 mg al día de omega 3. Este grupo de afectados por cáncer de esófago, a diferencia de los que no tomaron omega 3, sufrieron claramente menos infamación de la mucosa bucal y diarreas.
Asimismo, las pruebas realizadas para determinar el estado de su hígado confirmó que estaba más protegido frente a la quimioterapia, ya que los niveles de transaminasas GOT y GPT (indican la actividad de este órgano depurativo), eran más estables.
Fuentes:
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