Hace un mes el hombre que escribió la frase anterior no podía poner un pie en el suelo sin sentir un dolor lacerante.
Permanecía la mayor parte del tiempo en la cama y, aun así, el dolor de sus articulaciones no le dejaba un segundo de descanso.
Lo había probado todo: analgésicos, antiinflamatorios, inyecciones… y su situación continuaba sin mejorar.
Estaba desesperado, amargado e incluso había perdido las ganas de vivir.
Hasta que alguien le propuso probar un nuevo complemento nutricional que acaba de crear un nuevo laboratorio.
Miguel, así se llama este hombre, aceptó sin demasiada fe… pero al cabo de 2 semanas rebosaba entusiasmo y alegría.
Y al cabo de un mes y medio, escribió al laboratorio lo siguiente:
Miguel califica como “milagrosos” e “increíbles” los efectos del complemento nutricional que le ha liberado del dolor. Pero detrás de estos resultados hay toda una historia de investigación, descubrimientos científicos y sabiduría popular, algunos de cuyos episodios tienen como escenario el Japón, la India o la Suiza del siglo XVII.
¿Le gustaría conoce esta historia? ¿Y descubrir cuál es el complemento nutricional que liberó a Miguel de su incapacitante sufrimiento?
Más tarde se la contaré, pero ahora permítame explicarle brevemente por qué sus articulaciones cada vez funcionan peor.
Cuando somos jóvenes nuestro organismo fabrica grandes cantidades de colágeno, ácido hialurónico y otras sustancias necesarias para mantener nuestras articulaciones en buen estado.
Sin embargo, con el paso de los años el cuerpo va perdiendo esta capacidad regeneradora y es entonces cuando surgen el dolor y las molestias en los codos, rodillas y demás articulaciones.
Ahora, los científicos, tras muchos años de investigación, han logrado encontrar una forma de reactivar esa capacidad perdida y de que el propio organismo vuelva a elaborar todas esas sustancias sanadoras.
El resultado no es otro que el complemento nutricional que quiero presentarle: una fórmula capaz de proporcionar a su organismo los medios que necesita para curar sus articulaciones por sí mismo.
Para lograr este cometido, el complemento nutricional que le estoy presentando vuelve a poner en marcha los 4 mecanismos naturales que aliviaban y regeneraban sus articulaciones cuando usted era más joven.
Recuperar estas capacidades le permitirá disfrutar de unas articulaciones sanas y flexibles como cuando era joven. Y lo más importante, podrá llevar una vida completamente activa y sin las ataduras impuestas por la edad.
¿Se lo imagina?
Volver a pasear, a subir escaleras sin sentir dolores.
Levantarse de la cama de un salto.
Jugar con sus nietos, agacharse, abrir una lata sin problemas…
Todo eso que ahora le cuesta hacer o que directamente NO puede hacer.
Y además, sin tener que tomar peligrosos e ineficaces medicamentos ni someterse a la tortura de las inyecciones.
Solo con los propios recursos generados por su cuerpo.
¿Puede haber algo más natural?
No lo creo.
Este complemento nutricional, creado por el laboratorio Vitalisium, representa una verdadera revolución en el tratamiento de los dolores articulares, pues al contrario que los analgésicos y antiinflamatorios químicos, centrados en tratar los síntomas (algo que, por otra parte, no hacen con demasiada eficacia), su acción va encaminada a tratar las causas del dolor y la rigidez articular.
¿Pero cómo lograr poner de nuevo en marcha los cuatro mecanismos regeneradores de nuestro organismo?
Cuatro son las sustancias, completamente naturales, que hacen posible este “milagro”.
Siga leyendo para descubrir ya mismo sus apasionante historias, así como sus maravillosas propiedades.
La primera historia sucedió hace más de medio siglo y tuvo como escenario un laboratorio de Estados Unidos.
Años 60. Stanley Jacob y Robert Herschler, dos prestigiosos científicos, son contratados por una gran empresa de fabricación de papel.
Su objetivo es encontrar una aplicación para la lignina, un componente de la madera que se extrae durante la elaboración del papel. Sin embargo, durante la investigación, descubren por casualidad una forma natural de azufre denominada DMSO (dimetilsulfóxido).
Lo más sorprendente es que los trabajadores de la fábrica que entran en contacto con el DMSO comienzan a notar que sus heridas se curan antes y el dolor de sus articulaciones desaparece.
Posteriormente, numerosos estudios confirman la capacidad que posee el DMSO para aliviar dolores articulares y musculares. El único inconveniente de esta forma de azufre es que su uso se limita a la aplicación externa en las zonas doloridas.
Entonces los científicos dan un nuevo paso en sus investigaciones y es así como descubren el MSM (metilsulfonilmetano), un derivado del DMSO mucho más estable y que puede ser ingerido con seguridad para tratar los problemas articulares.
Sus beneficios, y los datos científicos que los demuestran, son realmente espectaculares:
Además, si la acción del MSM es realmente sorprendente, ahora imagínesela combinada con la del ácido hialurónico.
Hay un pueblo en Japón en el que no conocen la palabra “artrosis”. Se llama Yuzurihara y recibe el apelativo de “El pueblo de la Longevidad”.
Sus habitantes superan los 90 años en plena forma y parecen inmunes a los dolores articulares.
Cuando los científicos investigaron las causas de este sorprendente fenómeno, descubrieron que el secreto de la juventud de Yuzurihara se basaba en su peculiar alimentación.
En efecto, debido a su microclima, el arroz crece mal en esta zona de Japón y sus habitantes lo han sustituido en su dieta por una patata dulce llamada “taro”… que es muy rica en ácido hialurónico, el componente esencial del líquido sinovial que rodea y lubrica nuestra articulaciones.
En Occidente la alimentación es muy deficientes en ácido hialurónico. Además, a medida que van pasando los años, nuestro líquido sinovial va perdiendo su característica viscosidad, lo que hace que los huesos de las articulaciones choquen unos con otros y se produzca inflamación y dolor.
Hasta ahora el único modo de proporcionar ácido hialurónico a las articulaciones era a través de dolorosas y costosas inyecciones.
Pero afortunadamente los investigadores han logrado un importante hito científico: que este ácido pueda ser fácilmente ingerido… ¡sí, que lo pueda tomar con un sorbo de agua!
Y los beneficios no pueden ser más positivos para todos los que padecen dolores articulares:
Estoy seguro de que con lo que le he contado estará deseando probar este complemento cuanto antes, pero permítame presentarle el tercer componente fundamental de la fórmula destinada a acabar con los problemas de sus articulaciones.
Cleopatra, los emperadores de China y los sultanes de la India… Todos ellos veneraron esta maravillosa sustancia a la que consideraban tan valiosa como el oro o las piedras preciosas.
Se trata de la resina extraída de la Boswellia serrata, una planta que crece desde hace siglos en la India.
Recientemente la ciencia ha descubierto que esta resina posee unos poderosos activos naturales llamados ácidos boswélicos. Estos componentes benefician a nuestras articulaciones de 3 maneras:
Todas estas propiedades convierten a la resina de la Boswellia serrata en un verdadero tesoro de la naturaleza.
Y ahora voy a contarle cómo este increíble complemento nutricional es capaz de hacer que su organismo vuelva a fabricar su propio colágeno.
Aunque le cueste creerlo, una de las causas principales del dolor que sufre en sus articulaciones se encuentra en su intestino, concretamente en las placas de Peyer.
Estas placas, ubicadas en el tejido linfático y descubiertas por Johan Peyer, un anatomista suizo del siglo XVII, actúan como un especie de agentes de seguridad que filtran los virus y bacterias que pueden ser perjudiciales para el organismo.
El problema es que con los años las placas de Peyer comienzan a “fallar” y ya no distinguen bien entre las sustancias dañinas y las sustancias beneficiosas. Entre estas últimas se encuentra el colágeno, una sustancia que las articulaciones necesitan constantemente para regenerarse y mejorar su funcionamiento.
Las placas impiden que el colágeno llegue a las articulaciones y estas van perdiendo flexibilidad y resistencia, se hinchan y comienzan a doler.
Afortunadamente, científicos de la Universidad de Harvard, en Estados Unidos, han conseguido solucionar este problema de una manera simple pero efectiva.
La solución consiste en ingerir una pequeña cantidad de colágeno UC-II, una revolucionaria sustancia natural que al tener forma de filamentos penetra con facilidad en la barrera creada por las placas de Peyer.
El proceso es el siguiente:
Desde 2009 se han realizado numerosos estudios clínicos para verificar los beneficios del colágeno UC-II y los resultados son absolutamente sorprendentes:
Los investigadores llegaron a la conclusión de que, a la hora de reducir los dolores articulares y mejorar su movilidad, el colágeno UC-II no solo resultó más eficaz que el placebo, sino también que la combinación de glucosamina y condroitina.
El colágeno UC-II se produce exclusivamente en Estados Unidos y su proceso de fabricación está protegido por varias patentes.
Pero eso no ha sido impedimento para que Vitalisium haya obtenido la autorización necesaria para incluirlo en la composición de Primaflex, que es así como se llama el complemento nutricional que le estoy recomendando.
Estas cuatro sustancias son las columnas en las que se sustenta la revolucionaria fórmula de este gran complemento.
Olvídese de peligrosos medicamentos como el paracetamol, los opioides o los antiinflamatorios no esteroideos, que no solo no acabarán con el problema sino que además le causarán problemas en otras zonas de su cuerpo (corazón, cerebro, sistema digestivo…) e incluso acelerarán el deterioro de esas mismas articulaciones que pretenden curar.
Y tampoco es cuestión de recurrir a inyecciones ni a prótesis. Las primeras, además de ser caras y no demasiado eficaces, solo actúan parcialmente y durante un determinado tiempo. Las segundas pueden tener consecuencias incluso mortales, debido a la peligrosidad inherente a cualquier intervención quirúrgica.
La solución a sus problemas de artrosis está en su interior, en su propia capacidad para regenerar sus articulaciones, sin otros elementos que no sean los producidos por su propio organismo.
Pero para ello necesita la llave que ponga en marcha los cuatro mecanismos de los que le he hablado.
Conseguir esa llave para acabar con el dolor articular es ahora mucho más fácil. Únicamente es necesario que haga clic aquí o en el siguiente botón.
Ahora, tras décadas de investigación y por primera vez en España, la ciencia le ofrece una solución completamente natural para recuperar unas articulaciones flexibles y fuertes como las que tenía en su juventud.
Y lo mejor es que no tendrá que recurrir a fármacos, costosas inyecciones o arriesgadas intervenciones quirúrgicas. Será su propio organismo el que haga el trabajo más importante: rejuvenecer sus articulaciones.
¡A su salud!
P.D.: El laboratorio que fabrica Primaflex me ha informado que por tratarse del lanzamiento en España han lanzado una excepcional oferta que merece la pena aprovechar. No se pierda esta gran ocasión para regenerar sus articulaciones. Haga clic aquí y olvídese del dolor articular.
Fuentes: