La ansiedad puede incluso triplicar el riesgo de demencia en las personas mayores. Esta es la conclusión a la que ha llegado una investigación que lleva más de 20 años estudiando la salud de los mayores de 55 años(1) y que contó con 4.057 personas que al inicio del experimento no sufrían ningún tipo de deterioro cognitivo.
A lo largo del estudio se identificaron y analizaron los diferentes síntomas de ansiedad que presentaban los voluntarios, ya fueran de mayor o menor intensidad, así como aquellos pacientes que durante las dos décadas desarrollaron demencia.
Pasados los 20 años se realizó un completo análisis de todos los datos recopilados y se llegó a la conclusión de que el riesgo de demencia era 2,74 veces mayor en las personas con ansiedad, en relación con las que no la habían sufrido.
Artículos relacionados