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El vinagre de los 4 ladrones contra la peste

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Conocido como «el vinagre de los cuatro ladrones», este remedio casero a base de productos naturales salvó a miles de personas durante la peste del siglo XVIII. Analizamos sus propiedades antisépticas, antibacterianas, desinfectantes, etc, ¡y le indicamos como puede prepararlo usted mismo en casa!

Durante la peste de 1720 no había vacunas, ni antivirales, ni antibióticos… La población se trataba con remedios naturales.

Y uno de ellos se convirtió en el “remedio oficial” contra la peste en el Codex de la farmacopea.

Sucedió en Francia, en el siglo XVIII. La enfermedad hizo estragos y ¡llegó a matar a un total de 3 millones de personas!

En la ciudad de Toulouse hubo tantos muertos que podían verse los cadáveres tirados en las calles, donde eran despojados de sus ropas y monedas.

Por aquel entonces un grupo de cuatro ladrones fue arrestado. Y descubrieron asombrados que, a pesar de su repetido contacto con los cadáveres a los que robaban, ninguno de ellos estaba enfermo.

A cambio de no ser condenados, los ladrones revelaron su secreto. La receta de tan especial mejunje.

Consiste en un litro y medio de vinagre blanco, un puñado de artemisa, otro de filipéndula, otro de mejorana y uno más de salvia. Además, 50 clavos, 3 medidas de alcanfor y 50 g de raíz de campanilla, de angélica, de romero y de marrubio.

La clave era dejarlo macerar todo durante una quincena, antes de aplicarlo abundantemente por manos y cabeza, frotando muy bien.

Por eso se le llama el “vinagre de los cuatro ladrones”. Así, gracias a esta mezcla, miles de personas evitaron la muerte. En 1748, la fórmula incluso se registró en el códice de la Farmacopea francesa.

Hoy este preparado medicinal todavía se vende en algunas farmacias como antiséptico natural.

¡Y no es para menos, vistas las numerosas propiedades que ofrece su ingrediente principal!

Encuentro Artrosis

Desinfectante, antiséptico, antibacteriano…

La base de la mezcla es vinagre de sidra de manzana. Este vinagre es un poderoso antiséptico que contiene los siguientes minerales:

  • Potasio. Esencial para la buena salud de los músculos.
  • Fósforo. Para el buen funcionamiento de las células, nervios y músculos.
  • Magnesio. Conocido por ser beneficioso en caso de estrés, ansiedad y tensión gracias a sus efectos sobre la relajación muscular.
  • Calcio. Mantiene los huesos y los dientes fuertes.
  • Sodio. Juega un papel clave en el buen funcionamiento del sistema nervioso.

También contiene los siguientes oligoelementos, muy beneficiosos para la salud:

  • Hierro. Esencial para el transporte del oxígeno dentro del organismo.
  • Cobre. Contribuye al buen funcionamiento del sistema inmunológico.
  • Zinc. Proporciona protección contra el envejecimiento celular.

Por último, están las vitaminas C, B y A, así como ciertos aminoácidos.

Ahora bien, ¿cómo actúa exactamente este vinagre, capaz de poner en jaque a la mismísima peste?

Lo hace exactamente así:

  • Detiene la inflamación (en casos de fatiga, gripe o resfriados). Hay que hacer gárgaras con él.
  • Regula el tránsito intestinal, ya que alivia flatulencias, distensión abdominal, estreñimiento e incluso diarrea.
  • Alivia la acidez estomacal.
  • Ayuda a bajar la presión arterial y regula el azúcar en la sangre.
  • Lucha contra la intoxicación alimentaria, ayudando a destruir las bacterias malas que se encuentran en el sistema digestivo.
  • Reduce el dolor articular y muscular. Por ejemplo, en caso de lumbago, reumatismo, esguince, ciática o dolores musculares en general.
  • Cura aftas bucales.
  • Acaba con un callo en los pies o una micosis gracias a su poder antifúngico.
  • Quema grasas y regula el apetito.
  • Mejora la absorción del hierro y del calcio. Es por tanto un aliado en caso de anemia o para luchar contra la osteoporosis.

Combinado con estos productos naturales, es aún más efectivo

Pero hay algo incluso mejor. Si se combina con bicarbonato de sodio, el vinagre de sidra de manzana multiplica por diez sus poderes. Se vuelve así formidable contra el resfriado común.

Y al mezclarlo con limón se convierte en una bebida detoxificante de lo más eficaz. Es bueno tomarlo en ayunas todas las mañanas para expulsar las toxinas del hígado y estimular las enzimas digestivas para una mejor asimilación de los alimentos.

Anímese a hacerlo en casa y aprovéchese de sus múltiples beneficios. Aquí le contamos cómo puede prepararlo.


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